Las empresas que quieran aprovechar Twitter para el márketing social deben saber cómo usar los hashtags. Los hashtags son la forma de ordenar la información dentro de los millones de mensajes que se pueden leer en la red de microblogging, sirven para que un tuit determinado llegue a los usuarios a los que puede interesar o para reunir en un mismo lugar toda la información sobre un mismo tema o una misma persona o una misma empresa o evento, etc. Dicho de otra forma, un hashtag puede servir tanto para resaltar un mensaje como para aglutinar varios sobre una cuestión común.

Los hashtags son una herramienta versátil. Pueden funcionar como etiquetas, como lemas publicitarios, como reclamo, como palabra clave, para un concurso, como llamamiento, como aviso o como todos ellos a la vez. Ofrecen muchas posibilidades y seguro que hay más que están aún sin descubrir. Hay hashtags divertidos, serios, largos, cortos, minimalistas, con mayúsculas, indescifrables, gráficos... En cualquier caso, el objetivo es sobresalir de algún modo.

Una marca puede usar los hashtags para diferentes propósitos, como explican en la web hashtags.org:

Presentar un tema o comenzar una discusión

Twitter es conversación. Pero, ¿sobre qué se habla? Definir esa tema de conversación, esa discusión o debate es uno de los usos más extendidos y básicos de los hashtags. Ahora bien, ese tema puede ser general, incluso mundial (por ejemplo, #JJOO, si se quiere hablar de los Juegos Olímpicos, tema en el que pueden participar tuiteros de todo el mundo), o puede ser un tema que sólo interese a los seguidores de una marca (como, por ejemplo, el lanzamiento de un nuevo producto para los clientes más fieles). Por tanto, hay que tener en cuenta a quiénes se quiere llegar, a un grupo reducido de personas, pero fieles a la marca, o a toda la comunidad de Twitter o a otro grupo.

Lanzar un concurso

Twitter es una plataforma perfecta para desarrollar un concurso. Las marcas pueden incitar a la participación a través de un hashtag. Además, es una forma de diferenciar a los participantes. Es importante, por tanto, que el hashtag sea claro al tiempo que único. Se trata de evitar confusiones que pueden dar muchos quebraderos de cabeza. Imaginemos que se usa un hashtag que también usa gente que no participa en el concurso (que ni siquiera sabe qué marca lo ha lanzado). ¿Cómo saber quién lo usa para el concurso y quién por otra razón? La marca tendría un grave problema.

Por otra parte, se puede dar la información relativa al concurso (bases, reglas, premios, fecha de término, etc.) a través de tuits. Después, todos los participantes se podrán consultar con una búsqueda del hashtag elegido.

Chats

Efectivamente, Twitter también permite organizar chats, discusiones en las que puede participar cualquier tuitero. Por ejemplo, el blog ecuatoriano sobre periodismo La Columna Quinta (@Columna5) organiza tuitdebates en su Twitter. En un mensaje, presenta el tema. Desde la cuenta que organiza el chat, se pueden retuitear los mensajes más interesantes. Pero buscando el hashtag se puede seguir en directo todo el debate y, si se desea, participar.

Información

Twitter es, quizá, la fuente de información más rápida. Para los periodistas es indispensable. El problema, una vez más, es el exceso de información. Vivimos en un mundo con una cantidad de información abrumadora. En muchos casos, puede llegar a paralizar, por lo poco manejable (y difícilmente asimilable). La solución es elegir, encerrar esa información relevante, mediante hashtags.  (Y, cuando hablamos de información, no nos referimos sólo a las noticias, sino a información en un sentido más amplio.)

Organizar tuits

Ya lo hemos comentado. Los hashtag permiten organizar la información dentro de la infinitud de mensajes de la red de microblogging. Puede ser para organizar los propios tuits de la marca o para informarse de un asunto de relevancia en el sector.

Atraer seguidores

Todas las posibilidades anteriores convergen en ésta. Si una marca está presente en Twitter, en especial, en las conversaciones del sector al que pertenece, aportando contenido, información, incluso opinión, con constancia y moderación (hay cuentas de Twitter que son poco menos que spam), si se dan esas condiciones, atraerá a nuevos seguidores a su cuenta. Y, en último término, quizá esos seguidores lleguen a convertirse en clientes.